El teatro y los ideales políticos conforman una épica travesía familiar que refleja el exilio de millones forzados a abandonar su patria.

NOMBRES DE COMBATE

Los personajes son reales. Los padres y tíos del dramaturgo y director Martín López Brie son fuente de inspiración, información y protagonistas de esta historia. Infancias durante los 60s en las que el un padre llevaba a su familia al mismo lugar, usando la misma ropa, para tomar una fotografía grupal; golpes de estado y derrocamientos políticos que surgen en una Argentina convulsionada; jóvenes con ideales revolucionarios que surgen al mismo tiempo que su amor por el teatro; sueños por algún día llegar a ese país que celebra la muerte con calaveras de azúcar; amigos convertidos en torturadores, y un sinnúmero de bultos donde una mujer desesperada carga toda su vida al verse expulsada de un país en medio de una guerra civil. Son décadas las que se relatan, es la travesía de toda una vida.

Nombres de Combate es una pieza de teatro documental que rescata la memoria de la familia de su creador, al mismo tiempo que da cuenta de la historia de Argentina, sus horrores y dolores, durante las dictaduras militares que sufrió el país durante la segunda parte del siglo XX. Al ser un tema tan cercano a su propio corazón, la dramaturgia de López Brie es extensa, cubriendo a detalle decenas de anécdotas, desde la manera en que se escondió y rescató una novela prohibida de García Márquez, la forma en que se logró escapar de una muy cercana desaparición a manos del gobierno cuando estuvieron detenidos, hasta el cómo el famoso cantante argentino Sandro se conecta con la familia.

En la precisa manera en que la narrativa entremezcla lo íntimo con lo político, los terrores vividos a manos de un gobierno represor con las ilusiones de cuatro idealistas, al conectar el teatro con la violencia, es que López Brie consigue convertir sus orígenes en algo universal que refleja la realidad de millones de personas en todo el mundo que se han visto obligados al exilio, en este caso preciso llegando a tierras mexicanas para conformar un nuevo hogar. Para enfatizar esta conexión, durante el intermedio la producción invita al espectador a visitar una línea del tiempo que se ha dispuesto en el vestíbulo del teatro en la que se puede seguir con claridad los paralelos entre la historia familiar y el de Argentina entre 1930 y 1984.

Una piedra blanca en forma de corazón late ante la noticia del cáncer de un amado familiar; unos muñecos de playmobil sirven para escenificar la manera en que se entrenaba a jóvenes argentinos a matar usando changos como práctica de tiro; la sombra de un amigo detrás de un panel representa a personas queridas que han sido corrompidas por el sistema hasta convertirlos en bestias.

A través de diversos lenguajes escénicos, que incluyen el teatro de objetos y de sombras, la escenificación de Nombres de Combate permite que la longitud narrativa fluya sin empantanarse. López Brie apuesta por la intimidad con el espectador, el elenco conformado por Fernando Canek, José Carriedo, Gabriela Gallardo y Sofía Beatriz le habla a los ojos al público como si este fuera el propio Martín escuchando a su tía o a su padre mientras le comparten sus vivencias. Es en esta cercanía y el ingenioso uso de los elementos en escena, mismos que lejos de ser mera utilería son objetos reales  traídos desde tierras lejanas mientras se huía de la guerra, que la puesta en escena conecta, se adopta como propia, alcanza su relevancia y pertinencia.

Nombres de Combate de Teatro de Quimeras, de la Ciudad de México, se presentó en el Teatro del Colegio Americano se presentó el martes 15 de noviembre dentro de la 42 Muestra Nacional de Teatro en la ciudad de Torreón Coahuila.

DATOS GENERALES

(Toda la información contenida a continuación proviene de la producción)

OBRA: Nombres de Combate

DRAMATURGIA Y DIRECCIÓN: Martín López Brie

ELENCO: Fernando Canek, José Carriedo, Gabriela Gallardo y Sofía Beatriz.

DÓNDE: Teatro del Colegio Americano

DURACIÓN: 130 minutos con un intermedio de 10 minutos.