COORDENADAS PARA ENCONTRARNOS

Este año, la propuesta de la Dirección Artística de la 42 MNT fue la de presentar un paisaje de las teatralidades en nuestro país y para orientarnos en ese paisaje plantearon una serie de coordenadas: laterales; de la urgencia; del territorio; de la memoria en resistencia; de los público; por imaginar; teatro en el centro; de género y Coordenadas de Coahuila. La Pastorela Acardenchada de Sapioriz la encuentro ubicada en Coordenadas de lo público por ser un espectáculo cuyo sentido es convocar a una comunidad, un coloquio como ellos lo llaman, pero después de presenciar la muestra que nos trajeron de su Pastorela entendemos que se trata también, y quizá sobre todo, de una memoria en resistencia pues es una tradición que poco a poco se desvanece; de casi 100 personas que llegó a tener la pastorela, ahora “ya nadie quiere participar”, nos dicen ellos.

Lo anterior podemos saberlo porque después de la función se abrió la charla con el público, algo que ya no se hacía en las Muestras desde 2009 y que ciertamente se extrañaba, especialmente en una función como esta, no puede pasar descontextualizada por un lado y por otro, desde el público teníamos tantas dudas y tan poca relación con esto que sucede en nuestro propio país, la lejanía de la postmodernidad con la tradición; justo necesitamos estas coordenadas para entender mejor, para acercarnos un poco. En esa plática nos comentaron que solo presentaron una muestra de la Pastorela, cuarenta minutos, puesto que su Libro de Pastorela completo dura más de tres horas, pero como se hace en caminata por el pueblo de casa en casa, llega a durar más de 12 horas. También nos comentaron que se hacen en dos grupos uno de tres voces y otro de cuatro y que participan tres diablos. Nosotros solo vimos al grupo de tres voces con solo dos diablos.

Todos tenemos el referente de pastorela, lo común es una representación escénica muy convencional con pastores, diablos, La Virgen, José y los tres Reyes magos, pero la Pastorela Acardenchada es muy distinta es más bien un ditirambo cardenche. Además de los tres diablos y un ángel, no hay más personajes que pueblo. Todos son pastores, es decir solo vemos el coro y ocasionalmente un corifeo que recita unas estrofas. El cardenche es a capella, los cantos son hipnóticos difícil de seguir la historia, alguna canción de cuna nos indica que el niño ha nacido, pero eso es lo de menos, nos dejamos llevar por las voces. Nótese que utilizo un referente muy clásico occidental, el ditirambo, para hablar de un canto de otro territorio, de un contexto oprimido y lo hago porque son mis referentes, porque soy occidental, colonizada y colonizadora al mismo tiempo y ya no por mis ancestros sino porque seguimos prácticando esa opresión sobre el territorio; por eso es importante la presencia de la comunidad de Sapioriz en la Muestra, para ponernos de frente la huella de la memoria, las memorias en resistencia que persisten, la herida de nuestro país enajenado y darles el espacio que ha sido negado. Aunque siga siendo muy poco es algo y el público de la Muestra los abrazó con esa conciencia en un aplauso largísimo y lleno de entusiamo genuino, cálido y respetuoso, no condecendiente y eso a mí me da un poco de alivio, es un ungüento en la herida. No la sana, pero da un poco de alivio.