Para quienes desean descubrir los engaños que se esconden detrás de una fiesta de bienvenida.

ANIMALES DE COMPAÑÍA

“Aunque te queramos ayudar, esto va a salir fatal.”

Tras dos meses en un hospital psiquiátrico, Beth por fin ha sido dada de alta. Para celebrar tan gozosa ocasión, sus amigos le han organizado una fiesta sorpresa. Entre secretos, mentiras, obsesiones y un guacamole hecho con cubiertos de plástico, esta reunión poco a poco sacará a flote la podredumbre de cada uno de los presentes, revelando que aunque Beth es la que estuvo encerrada, todos tienen muchos asuntos que arreglar en sus mentes antes de que acabe la velada.

“¿De qué me serviría irme si resulta que yo soy el problema?”

La disfunción inherente en las relaciones afectivas entre adultos es explorada por Estel Solé en “Animales de Compañía”. Este melodrama con tintes ligeros de comedia reúne a cinco amigos en una cocina en la que un matrimonio disfuncional tiene que convivir con una mujer imposibilitada a accionar en el mundo real, y con un hombre que ha hecho de la mentira el modus operandi para tratar de proteger a quien él piensa que ama. Todo esto, bajo la mirada perenne de Beth, quien claramente es la persona más emocionalmente equilibrada del grupo.

“A mí me urgen unas vacaciones de mí mismo.”

Laura llega a la fiesta con una mano lastimada, producto de un desafortunado encuentro con una policía. Momentos antes, su esposo Marco estaba preparando guacamole con su cuñada Clara, todo bajo una evidente tensión sexual. A la llegada de Alex, poco antes del arribo de la festejada, se descubre una enorme telaraña de mentiras que Alex ha tejido para ocultar el paradero de Javi, el novio de Beth, misma que incluirá una hoja de instrucciones para cada uno de los invitados. La pretensión de “Animales de Compañía” es clara, una crítica a una sociedad donde la verdad rara vez es el valor predominante. Sin embargo, la dramaturgia no termina de hilar ciertas líneas argumentales, ejemplo de ello la situación económica del matrimonio, o el por qué Laura pareciera ser una persona influyente, entre otras. Asimismo, el texto no se adentra hasta el fondo de la cloaca emocional de los personajes, quedando todo en el terreno de la superficialidad, de lo digerible, incluso culminando en un final complaciente que dada la situación presentada no resulta orgánico. Una vez dicho esto, este nivel de narrativa resulta fácil de digerir, agradable para un público en busca de un divertimento dramático.

“Ya no cabe más mierda debajo de la alfombra.”

Completamente desquiciada por todo lo que ha sucedido durante la noche, Laura ha salido a dar una vuelta en su coche. A su regreso, se revelan una serie de eventos que en definitivamente apestan todo el lugar, reflejo claro del estado mental de todos los presentes. Bajo la dirección de Ana Lorena Pérez Ríos, trabajo enfocado en ilustrar las acciones marcadas en el texto mismo, el verdadero atractivo de “Animales de Compañía” se centra en su elenco conformado por Bárbara López. Mauricio Mancera, Viviana Serna, Mario Alberto Monroy y Adriana Larrañaga. Cada uno de los histriones aportan peso emocional a sus personajes, a partir de sus propias herramientas actorales, al mismo tiempo que consiguen que los momentos de comedia sean francamente divertidos.

“Algunos preferimos vivir engañados.”

“Animales de Compañía” se presenta de viernes a domingo en el Teatro Centenario Coyoacán hasta el 3 de abril. Boletos en taquilla y en ticketmaster.

DATOS GENERALES

(Toda la información contenida a continuación proviene de la producción)

OBRA: “Animales de Compañía”

DRAMATURGIA: Estel Solé

DIRECCIÓN: Ana Lorena Pérez Ríos

ACTÚAN: Bárbara López. Mauricio Mancera, Viviana Serna, Mario Alberto Monroy y Adriana Larrañaga.

DÓNDE: Teatro Centenario Coyoacán

DIRECCIÓN: Avenida Centenario 159, Del Carmen Coyoacán.

CUÁNDO: Viernes 20:30, Sábado 18:00 y 20:00, Domingo 17:30 y 19:30 horas. Hasta el 3 de abril.

COSTO: $500. Boletos en taquilla y Boletos para Animales de Compañía | 2022-23 | Ticketmaster MX

DURACIÓN: 90 minutos sin intermedio.