TODO EL MUNDO HABLA DE JAMIE
Para quienes desean ovacionar un musical que celebra la libertad de ser.
TODO EL MUNDO HABLA DE JAMIE
“Quiero ser un chico que a veces quiere ser una chica.”
Más allá de lo que pueda decir la muy conservadora y un tanto amargada maestra de orientación vocacional, Jamie no tiene la menor intención de tener una vida profesional común y corriente. Para el joven de apenas 16 años, sus sueños están llenos de glamoroso maquillaje, mucho glitter, grandes pelucas y, por supuesto, unos tacones rojos bien altos. No importa lo que opinen los demás, ni su padre, mucho menos sus compañeros de clase, Jamie está listo para subir al escenario y celebrar quien es: una Drag Queen con todo el resplandor y poder de la diversidad.
“Tienes que dejar que el vestido te elija a ti.”
Basada en la vida real de Jamie Campbell, quien reveló su historia en el documental Jamie: Drag Queen at 16, “Todo el Mundo Habla de Jamie” es un musical en torno al camino que emprende un adolescente para convertir sus sueños de ser una drag queen en realidad a pesar de las adversidades que su vida le plantean. Estrenado en 2017 en Londres, con libreto y letras a cargo de Tom MacRae y música de Dan Gillespie Sells, el multipremiado espectáculo es una verdadera celebración musical a la diversidad, a la libertad que tiene cada persona de ser, soñar y pertenecer, al mismo tiempo que presenta una dura crítica a una sociedad hipócrita y conservadora que aún permite el bullying, la violencia sistémica y la intolerancia por encima de la aceptación y la inclusión.
“Bello es partículas de glitter en lo gris.”
Para su cumpleaños 16, la mamá de Jamie le ha hecho el mejor regalo posible: unos tacones rojos. Sin embargo, el adolescente no está listo para salir a la calle con ellos, la sombra del rechazo de su padre aún en su mente. Esta situación es pie para la canción El Muro en mi Mente, donde el chico es consciente del camino que tiene que recorrer para vencer sus miedos. Más adelante, luego de que es sorprendido con maquillaje en un baño de la escuela, Jamie es obligado por la directora a pasearse por los pasillos del colegio mientras cantan Arte es. Las canciones que acompañan a la narrativa en “Todo el Mundo Habla de Jamie” son una mezcla de poderosas baladas como Mi Bebé con grandes números pop musicalmente contemporáneos como Pero tú no lo Sabes. El resultado es refrescante, especialmente considerando los pocos musicales actuales que llegan a la Ciudad de México, Adicionalmente, bajo la adaptación del también director Alejandro Villalobos, tanto los diálogos como las letras de las canciones cobran gran sentido del humor, relevancia y urgencia no sólo en Inglaterra donde sucede la acción, sino dentro del contexto actual de México, no. De tal manera, y como ejemplo, la historia de la Drag Queen Loco Chanelle, y de todas sus compañeras drag de escena, son muestra precisa de la manera en que el público conecta, se identifica y aplaude a rabiar mientras ríe con diálogos ingeniosos y disfruta de la canción La Leyenda de Loco Chanelle (y el Vestido Rojo Sangre).
“Eres Mozart en tacones.”
El mundo en que habita Jamie está compuesto de paredes de ladrillo pintadas de gris. A medida que transita por diferentes espacios se van abriendo paneles que revelan la cocina de su casa, unos casilleros, un baño escolar, un escaparate donde divas de la escena posan, o el camerino de unas fabulosas Drag Queens. A lo largo de los marcos de estas paredes, y del suelo mismo, luces van coloreando la escena dependiendo del estado de ánimo del protagonista, siendo el azul celeste el tono prevaleciente. La escenificación de “Todo el Mundo Habla de Jamie”, bajo la dirección escénica de Alejandro Villalobos, ofrece una producción que logra fortalecer tanto la trama como la música. La muy armónica amalgama entre la escenografía de Jorge Ballina y la iluminación de Félix Arroyo consigue crear momentos de sorpresa a cada momento, ambos elementos poniéndose al servicio de la historia y culminando con una emotiva y poderosa escena final coloreada con presteza en los seis colores del orgullo. Por su parte, las coreografías de Hugo Curcumelis consiguen en algunos números inyectar mayor fuerza al montaje y adentrar al espectador al universo queer y drag, usando ciertos estilos de baile como el voguing. No obstante, los bailes que se utilizan en las transiciones es un elemento que se agota rápidamente. Es igualmente importante mencionar que la musicalización en vivo de la obra, y el diseño de audio para la misma, a momentos no consigue que las letras corales se entiendan del todo, aun cuando ciertamente las canciones golpeen con toda su fuerza a las butacas, motivando al público a ponerse de pie al final del último número. No cabe duda de que la apuesta por este musical es grande, y los resultados no decepcionan en lo más mínimo.
“Una Drag Queen es algo a lo que hay que temer.”
Jamie es un chico lleno de inocencia y esperanza, o un orgulloso queer que deja de lado todos sus manerismos cuando revela el dolor que se esconde en su corazón; Loco Chanelle es un hombre que la vida lo ha obligado a madurar, aun cuando todavía conserva todo el fuego y chispa propio del drag, o un hombre mayor judío que es enteramente entrañable en su rol de mentor, o feroz en su alta peluca roja. “Todo el Mundo Habla de Jamie” es protagonizada tanto por Nelson Carreras como por Joaquín Bondoni. Ambos jóvenes se entregan de lleno al papel, cada uno de ellos desde un lugar completamente distinto a nivel interpretativo, con resultados por demás positivos. Ya sea cantando con un ligero temblor en la voz sobre sus miedo a andar en tacones en público, o levantando las manos en alto para declarar que es una edición limitada, Jamie es un personaje que alcanza grandes resultados en manos tanto de Carreras como de Bondoni, aun cuando la dicción del segundo es un área de oportunidad a mejorar. El papel de Loco Chanelle es otro que recibe interpretaciones totalmente distintas a manos de Rogelio Suárez y Alberto Lomnitz, quien además tiene la responsabilidad de la dirección actoral. Tanto el preciso manejo de la comedia de Suárez como la honestidad emocional de Lomnitz consiguen estupendos resultados.
“¿Alguna vez deseaste que fuera normal?”
Una vez dicho esto, es importante resaltar las interpretaciones tanto de Vanessa Bravo como de Flor Benítez, quienes dan vida a la mejor amiga de Jamie Pritti Pasha y a su madre Margaret, respectivamente. Mientras que Bravo demuestra su calidad vocal e interpretativa en canciones como Significa Bello, Benitez, quien alterna funciones con María Filippini, da una verdadera master class actoral y se hace merecedora de la mayor ovación de la noche al cantar con absoluta fractura emocional Mi Bebé. Igualmente destacable es la presencia en “Todo el Mundo Habla de Jamie” de las tres drag Queens Leexa Fox, Liza Zan Zuzzi y Regina Voce, siendo esta última un absoluto deleite al desplegar su vis cómica. El resto del elenco está compuesto por Tanya Valenzuela, Efraín Berry, Luz Aldán, Diego Meléndez, , Diego López, Desiree Pérez, Fernanda Terán, Karlo Rodriguez, Ana Sofía Cordero, Kevin Hernández, Fernanda Terán, Marco Tapia, Yatzil Aguirre, Bobby Mendoza, Daniela Rodríguez, Carlos Iriarte, Federico Stegmayer, Martha Garibay y Ana Rivero.
“Perteneces a un lugar.”
Recuerdo cuando me pinté las uñas la primera vez. Llegué al salón de belleza y, oh sorpresa, mi mamá estaba ahí. Al preguntarme qué hacía ahí, dude en decirle la verdad, avergonzado de confesar que quería aplicarme gelish por primera vez. Sin embargo, me armé de valor y le dije la verdad. Su respuesta, y al pensarlo se me cierra la garganta, fue decirme que ella me las invitaba porque estaban al 2×1. Conecto con Jamie, su madre es la mía, su amor es el mismo que me demuestra mi mamá cada vez que me chulea una falda, o dice que le encantan los tacones rojos que a veces me pongo. Yo confieso que no seré una drag queen, pero me encanta andar entaconada. Hoy sé con absoluta certeza y orgullo que pertenezco en toda mi diversidad.
DATOS GENERALES
(Toda la información contenida a continuación proviene de la producción)
OBRA: Todo el Mundo Habla de Jamie
LIBRETO Y LETRAS: Tom MacRae
MÚSICA: Dan Gillespie Sells
IDEA ORIGINAL: Jonathan Burell
ADAPTACIÓN Y DIRECCIÓN: Alejandro Villalobos
DIRECCIÖN MUSICAL: Analí Sánchez Neri
DIRECCIÓN ACTORAL: Alberto Lomnitz
COREOGRAFÍAS: Hugo Curcumelis
ELENCO: Nelson Carreras, Joaquín Bondoni, María Filippini, Flor Benitez, Rogelio Suárez, Alberto Lomnitz, Tanya Valenzuela, Efraín Berry, Vanessa Bravo, Luz Aldán, Diego Meléndez, Leexa Fox, Liza Zan Zuzzi, Regina Voce, Diego López, Desiree Pérez, Fernanda Terán, Karlo Rodriguez, Ana Sofía Cordero, Kevin Hernández, Fernanda Terán, Marco Tapia, Yatzil Aguirre, Bobby Mendoza, Daniela Rodríguez, Carlos Iriarte, Federico Stegmayer, Martha Garibay y Ana Rivero (alternan funciones).
MÚSICOS EN ESCENA: Analí Sánchez Neri, Paco García, Alan Varela, Javier Rodríguez, Fernando Novaretti, Marcia Medrano, Ricardo Zamora, Beto González, Mariana Chávez-Lara, Iván Vázquez, Roberto Bañuelos, Marie Anne Greenham, Miguel Sandoval, Josh Balandrano, Jerson Vázquez, Maribel Pedraza, Felipe Hernández y Kaoru Miyasaka (alternan funciones).
DÓNDE: Teatro Manolo Fábregas
DIRECCIÓN: Serapio Rendón 15, San Rafael, Cuauhtémoc.
CUÁNDO: Viernes 20:30, Sábado 16:30 y 20:00, Domingo 13:00 y 17:00 horas .
COSTO: $2,200, $1,800, $1,500. $1,200, $900 y $800. Boletos en taquilla y en goliiive | La vida es en vivo
DURACIÓN: 180 minutos con un intermedio de 15 minutos.