LOS EMPEÑOS DE UNA CASA
Para quienes desean ovacionar un montaje que captura la grandeza de Sor Juana Inés de la Cruz desde la comedia, el bolero y Miley Cyrus.
LOS EMPEÑOS DE UNA CASA
“¿Cómo va mi comedia?”
Sor Juana deambula por las estrellas que habitan en su mente. En medio de una luna llena, bellas rimas se aglomeran en torno al amor que llena su alma, uno del que no se habla, pero se siente. En esta ensoñación, la decima musa deberá atender a la petición de la virreina, su querida Lysi como le llama a puerta cerrada, de crear una comedia para ella. Entre enredos de capa y espada, de identidades confundidas y uno que otro travestismo, un palacio se convertirá en una fiesta barroca, una que celebra la magnificencia del teatro del Siglo de Oro en Español al son del bolero.
“Si así está en la tormenta, ¿cómo estará en la bonanza?”
En el marco de las celebraciones por los 90 años del Palacio de Bellas Artes, la Compañía Nacional de Teatro, dirigida por Aurora Cano, regresa el teatro al escenario de tan magno recinto luego de una demasiado larga ausencia. “Los Empeños de una Casa” de Sor Juana Inés de la Cruz ha sido la dramaturgia elegida para tan significativo evento, no sólo por ser una exquisita e ingeniosa comedia de enredos, sino también por considerarse una de las piezas más importantes dentro de la literatura novohispana del Siglo de Oro en Español. Este hecho es de mayor relevancia en este 2024 al ser una mujer quien es poseedora de tan alta valoración.
“¡Qué casa tan fina y qué dama tan bizarra!”
Pareciera que Doña Ana y Doña Leonor aman al mismo hombre, confusión no tan distinta a la que sienten Don Carlos y Don Juan en sus afectos, todo esto enfatizado por los enredos que provocan los criados Castaño y Celia. Justo en el momento en que uno de los caballeros se siente más desolado, los versos de Sor Juana se sustituyen por las palabras de Bobby Capó, antes de que comience el elenco entero, junto con el público a cantar Piel Canela. Alrededor de toda esta comedia, se encuentra una poetisa en conflicto producido por el afecto que siente por la virreina María Luisa Manrique de Lara y Gonzaga. Más allá de la dramaturgia de Sor Juana Inés de la Cruz, exquisita por sí sola, esta versión de “Los Empeños de una Casa” a cargo de la también directora Aurora Cano es una admirable labor de rendirle homenaje a la llamada décima musa, a su relación con la virreina, así como a las circunstancias en las que se presentó esta obra en el siglo XVII. De tal manera, la comedia comienza con prólogos en cada uno de los tres actos donde se ve a Sor Juana Inés de la Cruz en su proceso personal de escribir la comedia, se presentan las tres jornadas que conforman la obra, y se insertan una serie de números musicales con canciones como Quizás, Quizás, Quizás, Esta Tarde vi Llover y Camino de Espinas en un acertado rescate de la fiesta barroca, pero haciendo completamente asequible al público de 2024. Es en este evidente entendimiento del objeto de estudio, en tratar temáticas relevantes y urgentes en torno a la sexualidad de Sor Juana, así como del valor final del teatro de entretener al espectador con fino y a la vez absurdo sentido del humor, uno capaz de volver uno de los más recientes himnos pop sobre el empoderamiento femenino en un bolero, que Cano demuestra su capacidad y talento para traer una comedia escrita hace más de 340 años a la segunda década del siglo XXI.
“Me importas tú, y tú, y tú, y nadie más que tú.”
El escenario está dominado por un círculo inclinado al frente con un aro de luz blanca alrededor que representa la luna, símbolo importante en la dramaturgia de Sor Juana. En igual referencia a la dramaturga, una corona de espinas rodea la importante escenografía. A medida que la obra transcurre, una serie de trampas se van abriendo en él para crear las distintas habitaciones en la casa de Doña Ana y Don Pedro, mismas donde se podría servir una inmensa taza de café que cae de lo alto del teatro, o donde un criado se podría vestir de dama, incluyendo un corsé que referencia al icónico bra cónico que Jean-Paul Gaultier diseñara para Madonna en los 90s. Al final de cada uno de los tres actos, la compañía entera canta, y se le pide a la audiencia que se una a la verbena como si de un karaoke se tratara, pues en lo alto del escenario se proyecta la letra. En absoluta congruencia con la adaptación, Aurora Cano ofrece una propuesta de dirección en “Los Empeños de una Casa” que apela tanto al espectador casual, como al más conocedor de la dramaturgia y época de Sor Juana. Apoyada por un ingenioso y contundente diseño de escenografía e iluminación de Jesús Hernández, así como del deslumbrante diseño de vestuario de Jerildy Bosch, mismo que se complementa con el maquillaje y peinados a cargo de Maricela Estrada, la propuesta escénica de Cano demuestra la capacidad de tomar cualquier clásico y convertirlo en contemporáneo a partir de lenguajes teatrales no convencionales. Sin embargo, es igualmente destacable el equilibrio que Cano alcanza entre la comedia tradicional de época, el juego que establece con la audiencia quien está lista para cantar a todo pulmón, y la inserción de la poesía de Sor Juana en escenas por demás líricas. Este casi imposible juego de contrastes es malabareado en la puesta en escena con un ritmo preciso que mantiene la atención durante los tres actos.
“Amor es más laberinto que vil reflejo de ego.”
Sor Juana Inés de la Cruz se muestra abatida por los demonios que habitan su mente, pero al momento en que la virreina pregunta por su comedia, no tiene más remedio que ser sólo una mujer que decide descansar su cabeza en el hombro de quien ama. Ya en la obra misma, la criada Celia manipula a todos con delicia y lujo de picardía, no sin antes hacer cómplices a todos en la audiencia. No importa si se es un ser deliciosamente queer como Hernando, o un flemático personaje digno de su época como Don Rodrigo, todos bailan una coreografía digna de un enorme éxito de Miley Cyrus. La visión de Aurora Cano para este montaje de “Los Empeños de una Casa” sería imposible de alcanzar si no se contara con el talento necesario para llevar a cabo tan compleja enmienda. El elenco estable de la Compañía Nacional de Teatro proporciona a manos llenas el requerimiento con un despliegue de rango actoral a cargo de Óscar Narváez, Érika de la Llave, Marco Antonio García, Zabdi Blanco, Fernando Bueno, Nicté del Carmen, Mireya González, Jorge León, Federico Lozano, Irene Repeto, Adriana Resendíz, Shadé Ríos, Fernando Sakanassi y Mariana Villeseñor. A esto también se suma la presencia de Carlos Matus, Yurief Nieves y Edwin Tovar quienes se encargan de la musicalización en vivo de todas las canciones que se interpretan en escena.
“¿Para acabar la comedia quieres que mejor cantemos?”
No existe un espacio más grande para jugar que el teatro. En un escenario cabe un universo entero y mil más, uno donde las palabras de una de las más grandes escritoras en la historia de nuestro país se hermanan a la perfección con el chillido proveniente de un pollo de goma. Aurora Cano es capaz de realizar el más serio de los trabajos escénicos, he sido testigo de ello y lo he aplaudido de pie. Sin embargo, su mayor fortaleza como creadora es la de siempre buscar el gozo del espectador, de nunca olvidar el factor de diversión, de crear experiencias en el escenario que recuerdan a uno por qué el teatro es un lugar único en su especie. El palacio de Bellas Artes es un recinto al que se le debe respeto, el máximo escenario de nuestro país, no lo discuto. Dadas sus características acústicas, Cano también entiende que no hay mejor lugar para armar un karaoke multitudinario al ritmo de versos de Sor Juana.
DATOS GENERALES
(Toda la información contenida a continuación proviene de la producción)
OBRA: Los Empeños de una Casa
DRAMATURGIA: Sor Juana Inés de la Cruz
ADAPTACIÓN Y DIRECCIÓN: Aurora Cano
ELENCO: Óscar Narváez, Érika de la Llave, Marco Antonio García, Zabdi Blanco, Fernando Bueno, Nicté del Carmen, Mireya González, Jorge León, Federico Lozano, Irene Repeto, Adriana Resendíz, Shadé Ríos, Fernando Sakanassi y Mariana Villeseñor.
MÚSICA EN VIVO: Carlos Matus, Yurief Nieves y Edwin Tovar.
DÓNDE: Sala Principal del Palacio de Bellas Artes
DIRECCIÓN: Avenida Juárez S/N, Colonia Centro.
DURACIÓN: 150 minutos con dos intermedios.
DATOS DEL TEATRO: Cuenta con estacionamiento.