Para quienes se atreven a cuestionarse cuánto vale la vida de un hijo.

LOBOS POR CORDEROS

Por Juan Carlos Araujo (@jcaraujob)

“Estamos aquí para tratar de llegar a un acuerdo.”

El accidente fue terrible, una pérdida inmensurable para los padres de los niños que iban en el autobús, una catástrofe mediática para el colegio, un hecho lamentable que nunca podrá ser compensada por nada. ¿O sí? Entre lágrimas que corren sin parar, la angustia que provoca cada timbrar de un teléfono, a pesar del inevitable alivio que siente una mujer o la ira contenida de un hombre que no sabe cómo llorar, una junta secreta está a punto de comenzar y no habrá precio que detenga el dolor que se ha de liberar en todos y cada uno de los presentes.

“Se suponía que iba a ser un día normal.”

¿Qué es capaz de aceptar una persona por la promesa de un millón de dólares? Esta pregunta, eco de aquella famosa película de los noventas estelarizada por Demi Moore y Robert Redford, es una de las bases de donde el dramaturgo mexicano Reynolds Robledo construye “Lobos Por Corderos”, un poderoso melodrama donde, tras un terrible accidente de un autobús escolar, unos padres se tendrán que debatir sobre si deben o no aceptar la “propuesta indecorosa” que la directora de la escuela les ha puesto sobre la mesa como compensación por su pérdida.

“Las palabras adecuadas no son exactamente lo que queremos escuchar.”

Con diálogos ágiles y fluidos, con toda una serie de giros de tuerca en la historia que mantienen la absoluta atención del espectador y con mucha habilidad para la manipulación y el chantaje sentimental, Robledo engancha desde el inicio de la historia y no deja ir al público hasta el oscuro final. Aun cuando la parte media de la obra podría fortalecerse con una mayor agilidad en la trama para evitar así dar círculos sobre el mismo eje, el dramaturgo demuestra su capacidad para poder imaginar y narrar una buena historia con sólidos elementos de teatralidad.

“Hay que aprender a respirar diferente.”

Apropiándose de todo lo que aprendió como asistente de dirección de uno de los creadores escénicos más respetados del medio teatral, Daniela Padilla, quien co-dirige con el mismo Robledo, logra adueñarse del texto para construir un verdadero portento dramático que impacta desde múltiples niveles. Ya sea por la espléndida escenografía e iluminación de Patricia Gutiérrez Arriaga que transmite tanto la fragilidad de la situación como el inmenso hueco que existe en cada uno de los personajes, el imparable ritmo que se le imprime a la obra que llega a acelerar el pulso de los asistentes o el profundo trabajo actoral que evidentemente se ha realizado durante ensayos, la dirección de “Lobos Por Corderos” consigue que las palabras escritas se fortalezcan y cobren aún mayor sentido al ser traducidas a un lenguaje verdaderamente teatral y artístico, producto de una joven talento que ha sabido aprender de los mejores para así desarrollar su propia voz y un naciente creador que ha encontrado un hogar dentro del teatro.

“¡Tienen que dejar de juzgarme!”

La labor que realiza cada uno de los actores en “Lobos Por Corderos” no puede ser descrita más que como un indiscutible tour de forcé. Mientras que Mónica Huarte, como la directora del colegio tratando de contener una situación imposible de controlar, impacta al mostrar un lado menos conocido de su amplio rango actoral, Mariana Garza, en el papel de una madre que ha perdido a su hijo con Síndrome de Down, deja escapar toda la fuerza que es capaz de guardar en su penetrante mirada en un impactante trabajo de actuación vivencial donde el espectador percibe, sin lugar a dudas, que personaje y actriz se han fusionado en un mismo ser. Ya sea a causa de la ira desenfrenada que Alejandro de la Madrid proyecta como un padre castrado emocionalmente o por el profundo dolor que embarga a Fernanda Borches como una mujer incapaz de superar la recién pérdida de su hijo, cada uno de los espectadores no podrá evitar estallar en aplausos al final de la obra gracias a uno de los elencos más sólidos que he visto en escena en todo el año.

“Ya no eres el padre de nadie.”

Hay líneas que jamás se deben cruzar, hay conversaciones que nunca se deberían de sostener, hay ofertas que simplemente no se consideran y que se rechazan de inmediato. Sin embargo, somos humanos, la tentación es una amante peligrosa y siempre se ha dicho que hay un precio para todo. A lo largo de mi carrera profesional he recibido ofertas que me han hecho cuestionar mi profesionalismo, se me han planteado negocios moralmente cuestionables, he sido víctima del dinero y de la ambición y hasta ahora he dicho que no. Eso no quiere decir que no lo haya considerado, que no haya pensado qué pasará si… Todos lo hemos hecho, todos lo hemos pensado y en “Lobos Por Corderos”, por más que lo nieguen, también lo harán.

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DATOS GENERALES

(Toda la información contenida a continuación proviene de la producción)

OBRA: “Lobos Por Corderos”

DRAMATURGIA: Reynolds Robledo

DIRECCIÓN: Reynolds Robledo y Daniela Padilla.

ACTÚAN: Mariana Garza, Mónica Huarte, Fernanda Borches y Alejandro de la Madrid.

DÓNDE: Teatro Milán

DIRECCIÓN: Lucerna 64 esquina con Milán, Colonia Juárez.

CUÁNDO: Miércoles 20:30 hrs.

COSTO: $350. Boletos en taquilla y sistema Ticketmaster.

DURACIÓN: 60 minutos sin intermedio.

DATOS DEL TEATRO: Cuenta con valet parking.