HAMLET
Para quienes desean ver una reinterpretación contemporánea a la icónica tragedia de William Shakespeare.
HAMLET
“Fragilidad, ¿quién te dio nombre de mujer?”
Tras la tercera llamada, se proyecta el inicio de una vieja película de Hamlet en blanco y negro. Los vestuarios de época y las grandilocuentes actuaciones se dejan ver de inmediato. Acabada la escena, se da paso a que los actores se sirvan champagne, se tomen selfies con sus celulares, y se deje mas que en claro que, aun cuando hay algo muy podrido aquí, esto no es Dinamarca. Esta será una tragedia moderna, donde la venganza se convierte en un asunto familiar más que de reinados, donde el veneno tiene sabor a Mimosa, donde el amor entre dos mujeres no es tabú ni para William Shakespeare.
“Huye del peligro del deseo que se disfraza de amor.”
Considerada como la más importante tragedia de William Shakespeare, “Hamlet” es una historia de traición y venganza entre reyes y príncipes en la antigua Dinamarca, así como una clara alusión al poder transformador del teatro. Sus complejos personajes, su elaborada historia de locura y fantasmas, su descarnado derramamiento de sangre ha sido objeto de múltiples reinterpretaciones a lo largo de más de 400 años, siendo la versión del director alemán Thomas Ostermeier una de las versiones que más recientemente han sido objeto de discusión, estudio y aplausos. Tras haber adaptado y dirigido Titus en 2019, Angélica Rogel ahora aborda la historia de un principe en busca de hacer justicia al asesinato de su padre, desde una óptica contemporánea donde Hamlet es una mujer enamorada de Ofelia, el reinado se ha convertido en una corporación multinacional, y en la que un enterrador juega con una calavera mientras suena la famosa canción Perhaps, Perhaps en el radio.
“Si tuviste amor por tu pobre padre, venga su muerte.”
Tras enterarse de la verdad detrás del asesinato de su padre a manos de su propio tío Claudio, Hamlet decide fingir locura en su búsqueda de justicia. Desafortunadamente, esto significa terminar su relación con su amada Ofelia. Esta ruptura sucede en escena sin diálogos, en una coreografía en la que una carta es entregada al ritmo de música electrónica, en la que dos mujeres enamoradas deben separarse, aunque así no lo quieran. La adaptación que realiza Angélica Rogel a “Hamlet” reduce la longitud del texto, mas no la anécdota; la transporta a la época actual haciendo uso no sólo de un lenguaje más coloquial, sino aplicando situaciones más comunes en una familia adinerada del siglo XXI como el expresar que Hamlet quiere salir del país para estudiar un posgrado. Sin embargo, el punto más interesante de esta reinterpretación se encuentra en momentos en que las palabras salen sobrando, donde son los fantasmas en la mente de Hamlet quien le susurran las palabras de su padre, en la que el joven recita su más famoso monólogo mientras que todos los personajes a su alrededor sostienen espejos para que el príncipe se confronte con su propio reflejo y demonios. Es en este factor que la versión que presenta Rogel cobra mayor relevancia e interés para los más conocedores del material de origen.
“Con el anzuelo de la mentira consigues la verdad.”
El fantasma de Hamlet es la sombra de la hija misma proyectada en grande sobre una pared. Tras enterarse de la traición familiar en la su propia madre está inmiscuida, las paredes del hogar donde vive Hamlet se resquebrajan. Al momento de fraguar su vendetta a partir de montar una obra de teatro en la que se muestre el mismo asesinato que realizó Claudio, la iluminación del teatro se torna blanca y los actores se convierten en ellos mismos preparándose para hacer teatro, incluso Miguel Santa Rita vistiendo una cómica playera alusiva a la situación y Alejandro Morales haciendo referencia a un premio de teatro que ganó en el pasado. La dirección que Angélica Rogel aborda en “Hamlet” entremezcla la ficción con la metateatralidad, al mismo tiempo que explora los claroscuros que crean las sombras. De tal manera, la confesión de Claudio, con un crucifijo proyectado en sombras desde el lateral del escenario cobra una estética visual contundente. Espejos, naranjas, lámparas de mano y un par de palos son constantemente resignificados en el escenario para la creación de atmósferas logradas a partir de un sólido trabajo de Patricia Gutierrez en la iluminación, Natalia Seligson en vestuario, la escenografía de Aurelio Palomino y, destacadamente, el trabajo de musicalización de Hans Warner quien crea verdadera tensión con su instrumentación electrónica.
“Los locos con poder deben vigilarse con atención.”
Tras saberse abandonada, Ofelia se desmorona por completo frente a su padre; luego de haber tratado de parecer controlado y tranquilo, Claudio pierde por completo los estribos al sentirse acorralado; al momento en que la sangre comienza a correr en su alcoba la respiración de Gertrudis la ahoga en un reflejo de su propia angustia. El trabajo actoral que realiza Irene Azuela como Hamlet es honesto, sus emociones mostrándose contenidas, más no por ello menos verdaderas. Claramente hay un trabajo de interiorización con el personaje, al mismo tiempo que la actriz muestra habilidades físicas incluso para el combate escénico. A su lado, se destaca el trabajo interpretativo que realizan Emma Dib, Mauricio García Lozano y Naian González Norvind en los papeles de Gertrudis, Claudio y Ofelia respectivamente. Cada uno de ellos opera desde la fractura emocional, dejándose llevar por las pasiones de sus personajes en un claro contraste con la contención emocional de Azuela. El resto del elenco se conforma por Poncho Borbolla, Miguel Santa Rita, Tamara Vallarta, Alejandro Morales y David Gaitán.
“Muero, víctima de mi propia traición.”
Desde que empecé Entretenia, y si soy honesto desde que empecé mi carrera de teatro en los noventas del siglo pasado, me he enfrentado a una multiplicidad de montajes de “Hamlet”. Algunos más puristas, otros profundamente alejados del original; algunos en el escenario del Julio Castillo con miembros de la Compañía Nacional de Teatro, otros por todo el Centro Nacional de las Artes, o como un ridículo musical de Broadway. Aplaudo esta nueva propuesta, una que nos recuerda una vez más que las palabras de Shakespeare son universales y atemporales, una que nos deja más que en claro que el príncipe de Dinamarca existe en los libros de literatura, y en tu propio espejo distorsionado.
DATOS GENERALES
(Toda la información contenida a continuación proviene de la producción)
OBRA: “Hamlet”
DRAMATURGIA: William Shakespeare
ADAPTACIÓN Y DIRECCIÓN: Angélica Rogel
ACTUAN: Irene Azuela, Poncho Borbolla, Miguel Santa Rita, Tamara Vallarta, Assira Abate, Naian González Norvind, Emma Dib, Alejandro Morales y David Gaitán (alternando funciones).
DÓNDE: Teatro Milán
DIRECCIÓN: Lucerna 64, Colonia Juárez.
CUÁNDO: Viernes 20:45, Sábado 19:00 y Domingo 18:30 horas. Hasta el 1 de Mayo.
COSTO: $600 y $400. Disponibles en taquilla y en Boletos para Hamlet | Detalle de fechas para Más Teatro y Culturales | Ticketmaster MX
DURACIÓN: 130 minutos sin intermedio.
DATOS DEL TEATRO: No cuenta con valet parking o estacionamiento.