EL CORRIDO DEL REY LEAR
Para quienes entienden que se puede hallar a Shakespeare en los mejores escenarios o en medio del crimen organizado.
EL CORRIDO DEL REY LEAR
“Esta no es mi historia.”
Tratar de memorizarse sus diálogos, lidiar con un director que claramente está demasiado verde para el proyecto, y un grupo de actores que parecieran salidos de una televisora o, peor aún, del stand-up, son algunos de los problemas a los que el reconocido primer actor Héctor Balzaretti se está enfrentando en su nuevo proyecto teatral. Sin embargo, por más complicado que esto sea, nada es comparable con el inmenso reto al que se habrá de enfrentar está estrella del espectáculo durante una celebración de cumpleaños enmarcada por cabezas cortadas, cuerpos deshechos en ácido y una multitud de personas desaparecidas. Esto no es Shakespeare, es la dura y lamentable realidad de este país.
“Usted no es nuestro rehén, es nuestro invitado.”
Un actor de larga carrera teatral y edad avanzada lidiando con un nuevo montaje shakesperiano en medio de muchas dificultades; una relación fracturada entre padre e hija; un secuestro a manos de sicarios para celebrar un cumpleaños; una crítica a las nuevas generaciones obsesionadas con las redes sociales; una denuncia con tintes de glorificación a la cultura del narco y al crimen organizado. “El Corrido del Rey Lear”, del también director Fernando Bonilla, es una comedia con una multiplicidad de líneas argumentales y narrativas que sin duda divierte, incluso provoca sendas carcajadas gracias al ingenio que usa el dramaturgo, pero que no puede evitar caer en el melodrama manipulador, en la excesiva ilustración de las situaciones para asegurar que al espectador le quede claro el discurso, o, incluso, en justificarse a sí misma innecesariamente.
“Televisa no es una empresa, es una forma de ver la vida.”
Mientras que la compañía teatral profesional pretende montar una adaptación del Rey Lear dentro del contexto de una taquería, los asesinos, buchonas y demás criminales cuestionan la obra de Shakespeare desde sus propios referentes culturales. Por un lado, los actores profesionales se muestran superficiales, proponiendo a Chabelo como un posible protagonista de la tragedia del bardo inglés, seres detestables son presentados como seres humanos fallidos, vulnerables y complejos dignos de cierta conmiseración. “El Corrido del Rey Lear” construye personajes memorables, hilarantes y patéticos, reflejos de la propia realidad del mismo Bonilla y su familia, o desde la denuncia a la cultura del narco. Sin embargo, la premisa crítica de la obra se diluye al no permitir que la comedia satírica cobre fuerza. Una serie de monólogos sobre desaparecidos, justo antes de que la hija del actor secuestrado emita su propio discurso, así como una resolución final de sensibilidad exacerbada que anula gran parte del discurso al castigar a su personaje principal, son ejemplos de la manera en que la propuesta impone ideas, discursos o agendas políticas de manera forzada.
“Toda mi vida he tratado de aplaudirte.”
En el escenario siempre se encuentra el trono del Rey Lear. En la parte trasera del mismo se encuentra la palabra NADA escrita en letras blancas. Con pocos elementos se crea un salón de ensayos, un coche, una guarida de sicarios o hasta un teatro donde la mamá de un capo cumplirá uno de sus sueños de vida. En medio de situaciones ridículas y por demás divertidas, una serie de tambos salen a escena, los que típicamente se utilizan para derretir cuerpos con ácido. Estos escalofriantes contenedores servirán como marco para llevar a cabo una rutina circense de más de 8 minutos donde cabezas decapitadas servirán para hacer malabares o invocar al espíritu de Hamlet, o para recordar a quienes nunca tuvieron la oportunidad de volver a casa. La dirección de Fernando Bonilla en “El Corrido del Rey Lear” brilla cuando permite que el humor del texto salga a flote y la narrativa fluya libremente dando como resultado un ritmo que potencializa la comedia. Cuando la necesidad de equilibrar el discurso aparece con elementos más melodramáticos, la historia se empantana por momentos. Una vez dicho esto, el montaje de la titular canción, el trabajo de creación de personajes incluyendo un alter ego del mismo Bonilla, y la capacidad para intensificar la risa son elementos que se destacan en la puesta en escena.
¿Qué es un actor si no un narcisista que sabe hablar bonito?”
Los encargados del secuestro del gran Héctor Balzaretti son La Mojarra y El Chito. Ambos criminales con varios muertos sobre sus conciencias, el primero se encargará de hacer al Bufón, el segundo a una de las hijas en la producción clandestina de El Rey Lear. La Mojarra encontrará su sensibilidad y humanidad en Shakespeare, mientras que el Chito hará gala de sus capacidades circenses y sufrirá de un enorme ataque de pánico. Entre un elenco talentoso conformado por Juan Carlos Colombo, Alejandro Morales, Valentina Sierra, Daniela Arroio, Malcolm Méndez, Miguel Tercero, Miguel Alejandro León y Juan Daniel García Treviño, se destaca la labor realizada tanto por Méndez como de García Treviño quienes aportan la mayor fractura y divertimento dentro de la puesta en escena.
“¿No podrían rescatarme después de la función?”
En un lapso de dos semanas he tenido la oportunidad de ver cómo la tragedia de Shakespeare sobre un padre anciano y su relación fallida con sus hijas es reinterpretada por grandes creadores escénicos. Por un lado, Los Colochos crearon a una diva decadente en Reina, por el otro Puño de Tierra lleva las palabras del bardo inglés al terreno del narco en “El Corrido del Rey Lear”. La atemporalidad de Shakespeare es incuestionable, su relevancia en la actualidad más que palpable, su mensaje tan urgente hoy como lo fue el día de su primera representación.
DATOS GENERALES
(Toda la información contenida a continuación proviene de la producción)
OBRA: El Corrido del Rey Lear
DRAMATURGIA Y DIRECCIÓN: Fernando Bonilla
ELENCO: Juan Carlos Colombo, Alejandro Morales, Valentina Sierra, Daniela Arroio, Malcolm Méndez, Miguel Tercero, Miguel Alejandro León y Juan Daniel García Treviño.
DÓNDE: Teatro Helénico
DIRECCIÓN: Avenida Revolución 1500, Guadalupe Inn.
CUÁNDO: Martes, Miércoles y Jueves 20:00 horas. Hasta el 15 de diciembre 2022.
COSTO: $410, $360 y $260. Boletos en taquilla y Boletos | EL CORRIDO DEL REY LEAR | Centro Cultural Helénico (sistemadeboletos.com)
DURACIÓN: 130 minutos sin intermedio.
DATOS DEL TEATRO: Cuenta con estacionamiento y valet parking.