Para quienes creen que el amor, como el fuego, puede nacer y acabarse en segundos.
CON EL FUEGO POR TESTIGO
Por Juan Carlos Araujo
Fotografías: Ricardo Castillo Cuevas (@RiAlCastillo)
“Estaría padre hacer algo trascendental con nuestras vidas.”
Un reencuentro casual en un aeropuerto demuestra que la amistad que existió hace tantos años provocó chispas que nunca se apagaron. Un café, una sonrisa, un toque en el hombro y un roce en la mano, un beso furtivo y la llama ardió con tal intensidad que sus sueños se volvieron realidad. Lamentablemente, cuando el fuego surge con tal fuerza tiende a apagarse con la misma rapidez y las cenizas que deja corren el peligro de extinguirse sin remedio. Las enfermedades que puedan aquejar al cuerpo son nada si se comparan con el daño que provoca el miedo, la presión social, las inseguridades y la certeza de que todo va a fallar. En la mesa, unos Sony walkman son testigo silencioso de una historia de amor entre dos hombres destinada a fracasar.
“¡Cásate conmigo chingao!”
En la actualidad, la gente homosexual cuenta con más derechos que nunca. Hace veinte años la idea de casarse era imposible de imaginar, ya ni para qué mencionar la adopción. Hoy en día, estas son opciones muy reales y una pareja de hombres puede perfectamente caminar tomándose las manos por las principales avenidas de la ciudad de México sin temor a ser insultados o incluso golpeados. Sin embargo, aún existe mucho camino por recorrer y los fantasmas abundan. El VIH, el miedo al rechazo, a ser discriminado y todas esas miradas que siguen juzgando en silencio son fuente de inspiración para que Arturo Viramontes y Alejandro Torrecillas escribieran “Con el Fuego por Testigo”.
“Todo fue tan precipitado que no sé cómo voy a explicarlo.”
La fallida historia de amor entre Andrés y Emiliano da como resultado un muy sentimental melodrama donde una noche de pasión lleva a los protagonistas a casarse en un arranque de locura, acción que se verá destruida con la misma rapidez ante el golpe brutal que trae consigo la realidad. A nivel dramaturgia, “Con el Fuego por Testigo” es bien intencionado. Sin embargo, Viramontes y Torrecillas no pueden evitar caer en lugares comunes y clichés, incluso llegando a tocar temas que en 2014 resultan un tanto superados. Lo bueno es que nada de esto evita que los románticos y soñadores empedernidos suelten un suspiro ensoñador o que los cínicos esbocen una sonrisa de satisfacción cuando sus sospechas se vean confirmadas al momento del derrumbe. Un texto no perfecto, sin duda, pero que evidentemente fue elaborado con mucho amor, entregando un poco del alma de los dos involucrados.
“¡No metas a la sociedad en esto!”
El verdadero atractivo de “Con el Fuego por Testigo” radica en la dirección que aporta José Cremayer. Ya sea con el uso preciso que se le dan a dos mochilas, de donde saldrán tazas de café, actas de matrimonio, un joystick vintage de atari e incluso un cambio completo de vestuario; dos poderosas coreografías donde dos amantes se encuentran y se entregan no sólo a la pasión, sino a la risa y encantamiento de ambos; o con un muy bien elaborado manejo del tan reducido espacio disponible en la sala, Cremayer consigue sacar lo mejor del texto para crear momentos verdaderamente conmovedores, románticos o desgarradores con un simple cambio de luz, la musicalización adecuada o un ligero ajuste a una camisa o un saco. Aun cuando el ritmo definitivamente debe de ajustarse para intensificar los momentos dramáticos de la obra, que a momentos se sienten demasiado apresurados, el director muestra talento y visión demostrando que cuando texto se traduce existosamente a escena todo puede cobrar nuevo sentido.
«Divorciémonos si quieres pero sigamos la relación.”
Además de haber escrito “Con el Fuego por Testigo”, Arturo Viramontes, junto con Claudio Guevara, son los actores encargados de dar vida a Andrés y Emiliano. La entrega con la que ambos interpretan sus papeles, la convicción que tienen en este proyecto, el amor con que se dejan llevar por sus personajes es evidente, y a momentos consigue escenas tanto enternecedoras como memorables. Un mayor trabajo con el director conseguirá mejores resultados, pero cuadros como el cambio de ropa en juego de sombras o las miradas llenas de deseo durante el primer encuentro son destacables y aplaudibles.
“Hasta las formas de amar envejecen.”
La comunidad gay ha luchado durante años por igualdad y ha logrado enormes avances como la legalización del matrimonio entre personas del mismo sexo. Con ese gran logro vino también el divorcio gay y la separación de bienes gay y la división de amigos gay. Somos una sociedad diversa y rica en variedad, pero al final todos somos humanos y, seamos de la preferencia que seamos, cometemos los mismos errores, somos impulsivos, a veces tontos románticos y también crueles desgraciados, buscamos estar con alguien pero nuestros miedos nos boicotean, destruimos lo que amamos y perpetuamos nuestras fallas hasta el final. Hoy soy feliz y me encuentro estable en una relación seria y formal con una persona a quien amo profundamente. Me tardé 39 años en encontrarlo, un divorcio y una multitud de relaciones fallidas para llegar ahí. Todos nos equivocamos y tenemos miedo, pero lo podemos superar… si lo sabré yo.
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DATOS GENERALES
(Toda la información contenida a continuación proviene de la producción)
OBRA: “Con el Fuego por Testigo”
DRAMATURGIA: Arturo Viramontes y Alejandro Torrecillas.
ACTÚAN: Arturo Viramontes y Claudio Guevara.
DIRECCIÓN: José Cremayer
DÓNDE: Espacio Urgente 1 dentro de Foro Shakespeare.
DIRECCIÓN: Zamora 7, Colonia Condesa. A dos cuadras del Metro Chapultepec.
CUÁNDO: Sábado 18:000 hrs.
COSTO: $150 entrada general. Boletos en taquilla y ticketmaster.
DURACIÓN: 40 minutos sin intermedio.
DATOS DEL TEATRO: El Foro Shakespeare no cuenta con valet parking, pero hay un estacionamiento a lado. Se encuentra muy cerca del metro Chapultepec. Les recomendamos revisen el resto de la cartelera, tanto del foro principal, como de los espacios alternativos con los que cuenta el lugar.