LA MUJER NIÑA NO DESPIERTA
Para quienes desean acompañar a una sobreviviente por su camino hacia la paz y el perdón.
LA MUJER NIÑA NO DESPIERTA
“Rompe tu silencio.”
La mujer del tiempo ha llegado hasta la cama donde yace moribunda Eliza. La anciana la mira con miedo en la mirada e implorándole le anuncia que aún no, que todavía no está en paz. El recorrido por los recuerdos inicia. Todo comienza con una separación en Viena poco antes de que el Holocausto comenzara. Dos caminos distintos, uno hacia un campo de concentración, el otro hacia la libertad, ambos acechados por la sombra de la muerte que no cesa de perseguirles entre flores caídas. Quizás en este camino por la memoria y en la música de un olvidado violín es que Eliza por fin pueda encontrar el descanso que tanto anhela.
“Eres la tumba de todos mis recuerdos.”
Tomando como fuente de inspiración la verdadera historia de supervivencia a la Segunda Guerra Mundial de su propia madre, la dramaturga y directora Susana Frank presenta “La Mujer Niña no Despierta”, un onírico y casi surreal melodrama que busca evocar las sensaciones de vivir a través de un horror como el Holocausto más que el mero contar una anécdota. El resultado es una poderosa visión de la guerra desde lo femenino, principalmente, así como una honesta invitación a recapacitar sobre la capacidad de destrucción que tiene el hombre como raza.
“Si te llegan a tomar prisionera, haz lo que sea con tal de sobrevivir.”
Eliza, representada en su niñez, como mujer y como anciana, transitan por los recuerdos de esta última. La separación de su esposo Gustav en Viena, la pérdida de su bebé no nato mientras trata de escapar de Europa, su incapacidad de reconciliarse con el pasado representado por un viejo violín y la ayuda que recibió de amigos para llegar a México son parte de toda una serie de recuerdos. “La Mujer Niña no Despierta” es profundamente sencilla en su primera lectura, una recapitulación de memorias por parte de una mujer a poco tiempo de morir para poder irse en paz. Sin embargo, Frank indaga mucho más profundo en su subtexto, plantea preguntas sobre la mujer y la guerra, expone el paso del tiempo en su capacidad sanadora, ve la pérdida desde una mirada aterradora y a la vez poética. No cabe duda de que la cercanía de la anécdota que la dramaturga quiere compartir la ha llevado a lugares íntimos que plasma en la obra de forma contundente y más sugestiva que literal.
“Aún hay tiempo para sobrevivir.”
Cubierta de pies a cabeza en blanco, la mujer del tiempo sostiene un reloj de arena. Eliza mujer y vieja la observan, la primera con miedo en la mirada, la segunda con cansancio y quizás un poco de resignación. Más adelante, esta mística figura se encuentra con Gustav, un hombre quebrado por el terror vivido en un campo de concentración y le ofrece un pedazo de pan y le pregunta por su porvenir. A nivel dirección “La Mujer Niña no Despierta” encuentra su inspiración en el surrealismo, específicamente en las pinturas de Leonora Carrington y en las imágenes de la fotógrafa Kati Horna. El resultado es una mancuerna exquisitamente dolorosa y visualmente arrebatadora entre dramaturgia y escenificación donde cada escena está provista de una fuerte carga emocional a través de una imagen meticulosamente armada y coreografiada. Frank no tiene prisa por contar la anécdota, permita que las sensaciones fluyan por el escenario a su ritmo, que los cuadros tomen forma pausadamente, para poder golpear con mayor impacto hacia las butacas con su propuesta. Aunado a todo esto, es importante mencionar el impecable diseño de audio así como el manejo de escenografía, ambos elementos esenciales para la creación de una atmósfera envolvente e inmersiva. Sin duda, un verdadero logro teatral para la compañía de Teatro Arte Laboratorio La Rueca A.C. la cual celebra el año próximo 40 años de existencia.
“¿Cuál es el origen de tanta maldad en el ser humano?”
Recostada en una camilla para enfermos, la anciana Eliza se convulsiona mientras es visitada por la mujer del tiempo. Esta frágil y aterrada mujer se convierte momentos después casi en una niña juguetona y fascinada por el mundo al que se le permite regresar, aquel donde reconoce su casa, sus ropas y, más importante, su violín. Tras un retiro voluntario de más de 18 años, la actriz Aline Menasse regresa al escenario con “La Mujer Niña no Despierta”. Accionando por completo desde la entraña misma, mostrando toda una gama emocional verdadera que va desde el miedo a la muerte como el dolor de perder lo más querido, pasando por una franca felicidad al tocar las cuerdas de su tan amado instrumento, Mensasse toma la escena por asalto y la hace suya. Igualmente destacable resulta la interpretación de Omar Martínez G. como Gustav, quien consigue transformarse de un idealista revolucionario a un emancipado sobreviviente de la guerra simplemente con la mirada y el dolor de sus palabras. El resto del elenco conformado por Valeria Díaz G., Eunice Moreno, Valeria Salinas y Cinthia Patiño logran resultados solventes para la puesta.
“No importa que hayan mutilado mi inocencia, estoy viva.”
Pocos son los placeres de un crítico teatral como el de tener la oportunidad de presenciar una verdadera evolución en una propuesta escénica. “La Mujer Niña no Despierta” se presento en la 39 Muestra Nacional de Teatro en 2018 en el Teatro El Galeón Abraham Oceransky. En ella, fui comisionado para escribir para la Muestra Crítica sobre la puesta en escena. El resultado de esa experiencia no fue positivo, por decir lo menos. No obstante, a un año de aquella confrontación, me reencuentro de nuevo con la obra de Susana Frank y lo que presencio ahora es una verdadera maduración y evolución, un trabajo profundo y redondo, contundente en todos sus vértices, digno de ser no sólo aplaudido, sino verdaderamente ovacionado. Es un verdadero placer decir que aquella dura crítica hoy ya no tiene cabida.
DATOS GENERALES
(Toda la información contenida a continuación proviene de la producción)
OBRA: “La Mujer Niña no Despierta”
DRAMATURGIA Y DIRECCIÓN: Susana Frank
ACTÚAN: Aline Menasse, Valeria Díaz G., Eunice Moreno, Valeria Salinas, Omar Martínez G. y Cinthia Patiño.
DÓNDE: Los Talleres
DIRECCIÓN: Francisco Sosa 29, Coyoacán.
CUÁNDO: Viernes 20:00, Sábado 19:00 y Domingo 18:00 horas. Hasta el 14 de Julio.
COSTO: $150. Entrada general. Boletos en taquilla.
DURACIÓN: 75 minutos sin intermedio.
DATOS DEL TEATRO: No cuenta con estacionamiento o valet parking.