Para quienes han fantaseado con poder ver muchas obras de teatro en una sola noche.

MICROTEATRO: POR FANTASÍA

RESEÑAS PARTE 2

SALA 8: SODOMA E IGOR MORRA (Sesión Golfa)

Igor ha decidido cumplir una de sus más grandes fantasías: Tener una sesión desenfrenada de sexo sadomasoquista con un travesti, mezclado con drogas. ¿Qué podría salir mal? Reyes es un travesti experimentado en las artes del placer carnal que carga en su bolsa toda una colección de esposas, látigos, máscaras y dildos. ¿Qué podría salir mal? La casera Juana está sencillamente hasta el copete de ese muchacho Morra quien no ha pagado la renta en meses. ¡En este preciso momento le va a ir a cobrar y no se irá hasta que consiga su objetivo! ¿Qué podría salir mal?

Una muy ingeniosa y perversa comedia de enredos, que nos remite directamente a la película norteamericana “Weekend at Bernie’s”, se encuentra con el inmenso ingenio y colmillo escénico de Daniel Vives “Ego” (mejor conocido por su personaje de La Supermana) para producir la más irreverente, hilarante y alucinante opción de la temporada. Hay una línea argumentativa pero les aseguro que ninguna función es igual ya que la chispa para la improvisación de todos los involucrados, así como un muy, muy, directo involucramiento con el público consiguen que nadie esté a salvo de ser la siguiente “víctima” en un remolino de carcajadas y escándalo. Mi enorme respeto para el profesionalismo de Daniel, quien se entrega de lleno a su personaje en cada una de las funciones, sin importar que tan agotador pueda esto resultar, porque créanme, el nivel de energía que requiere para interpretar una sola vez “Sodoma e Igor Morra” podría dejar fisicamente agotado a muchos. Les aviso que seguramente se convertirán en parte de la obra, ya sea como plantas, cortinas o puertas de closet; los van a tocar, puede ser que incluso los estrujen o acaricien y no necesariamente en los brazos o piernas. Déjense llevar, únanse a esta bacanal.

SALA 9: VOLVERÁS (Sesión Golfa)

Después de tanto tiempo juntos, la relación ya está cansada. Los besos y las caricias que antes excitaban, ahora simplemente se han convertido en piel contra piel sin mayor interés. Ese cuerpo que alguna vez calentó tanto a Carlos es ahora uno más entre millones. Cuando una pareja ha caído en una rutina, en un estado de coma donde nadie muestra la menor intención de cambiar las cosas y el cinismo toma el lugar del cariño, se deben de tomar medidas serias si es que queda algo por arreglar. Vicente decidió salirse de la oficina temprano y sorprenderlo con rosas; Carlos se encontró a Pepe.

Las fantasías a las que se tienen que recurrir para que una pareja siga a flote después de años se reflejan de manera muy cierta en “Volverás”. Un interesante trabajo que no sólo aprovecha el talento sino el físico de sus actores para atrapar a los espectadores en las redes de este jueguito que muchos hipócritas pensarán es irreal o que sólo sucede en el mundo homosexual, pero que si somos un poquito sinceros, veremos el reflejo de cada uno de nosotros ya sea en pasado, presente o muy seguramente futuro.

SALA 10: VENIMOS X PAZ

La vida de Hermenegildo Paz es un absoluto desastre y lo peor de todo es que lo sabe. Encerrado en su departamento, armado de un gis para ventilar todas sus frustraciones, un colchón y una soga, Paz no está dispuesto a continuar con su miserable existencia ni un segundo más. Como todo en su vida, hasta su suicidio le saldrá mal ya que la PGR ha llegado con la misión de llevarlo ante los alienígenas que han aterrizado en nuestro planeta clamando por su presencia. Entre la soga y la pistola, no hay manera de ayudar al mediocre señor Paz.

Una premisa que resulta ingeniosa en papel, a partir de un juego de palabras, encuentra vida en la sala 10 con una manufactura sin mayores aspavientos pero que resulta efectiva para quienes gusta de una comedia de tipo sketch televisivo. La exageración gestual y la comedia física, mucho más propias de la farsa que de la comedia, hacen su aparición durante toda la función en un fuerte intento por sacar el mayor provecho del material provisto, en algunos casos con buenos resultados. El elemento sorpresa del final de la obra resulta simpático y logró arrancarme una buena sonrisa para cerrar.

SALA 11: SIRENA (Sesión Golfa)

Esas llamadas eternas cuando uno está conociendo a la persona que podría llegar a ser algo más que un simple conocido o amigo, son maravillosas. Horas y horas al teléfono hablando un poco de todo y un mucho de nada, compartiendo sueños, haciendo mil preguntas, confesando fantasías que nadie conoce. Después de pasarse todo el día encerrada en la tienda de abarrotes donde trabaja, Gabriela está más que lista para cerrar el changarro e irse de ahí para pasársela bien. Hay que tener mucho cuidado con lo que se desea, en cualquier segundo se puede volver realidad.

Un fuerte trabajo de producción convierte la sala 11 en una típica tiendita de vecindario donde encontramos lo que pudiera parecer un sketch cómico sin mayores pretensiones donde la pasaremos bien con esta naquita de vecindad. Lo que esto consigue muy inteligentemente es que bajemos nuestras defensas y así poder golpearnos con mayor fuerza cuando súbitamente alguien decide cumplirle su “fantasía” a Gabriela. La actuación de Lakshmi Picazo (quien alterna funciones con Andrea Guerrero) es adorable durante la comedia, consiguiendo un fuerte contraste con la furia que seguirá después. Lo verdaderamente interesante viene cuando Francisco Rubio (quien alterna con Armando Hernández) hace exactamente lo opuesto, al ser temible cuando aparece y sencillamente adorable en su idiotez al final. Una inteligente dirección que sabe aprovechar el texto para sacar lo mejor de su elenco y dejar al público con la piel de gallina.

SALA 12: LA ÚLTIMA VEZ QUE DETUVIMOS EL TIEMPO

En un futuro incierto la tecnología ha logrado avanzar lo suficiente para que detener el tiempo sea una realidad. Resultado de una búsqueda desesperada, este gran logro científico se debe a que en poco, demasiado poco, un asteroide se impactará con la tierra para destruirnos. Lo bueno: la permanencia de la humanidad en un estado de limbo eterno donde lo real y lo virtual han perdido las fronteras. Lo malo: la soledad absoluta de vivir dentro de una burbuja ilusoria, aislados de todo contacto con otro ser humano. Ninguna fórmula matemática tomó en cuenta el peso del destino, la fatalidad de enamorarse, la necesidad humana de tomarse de las manos, de un beso que detone el final de los tiempos.

La ciencia ficción es una parte importante del mundo de la fantasía y hace una muy inteligente aparición en “La Última Vez que Detuvimos el Tiempo”. La dramaturgia de Antonio Alcántara es irresistible para los fanáticos del género y de gran atractivo para todos los demás en una premisa que me remontó a una de las más entrañables películas de 2012, “Buscando un Amigo para el Fin del Mundo”, donde el amor logra imponerse ante cualquier problema, incluso el apocalipsis. La dirección de Juan Celis pareciera ser de lo más sencilla, pero el trabajo de iluminación es sorprendente al crear un mundo virtual tridimensional a partir de un juego de sombras de colores en contraste con el mundo “real” que contiene una simple sombra negra. Todo en esta vida es una elección, esta es sin duda la más interesante a nivel intelectual de esta temporada.

SALA 13: MILENKA

Milenka, mi pequeña, quien nació del amor para después ser desechada cual basura al incinerador. Con su vestido negro y sus labios pintados de rojo, Milenka tuvo una época de inmensa felicidad, alimentándose de los cuidados que recibía de su amo y señor junto con los aplausos que arrancaba del público cada noche en el escenario. Nada es para siempre y esa enorme dicha llegó a su fin. Mi pequeña creyó que el encierro en el sótano sería lo peor, pero las verdaderas llamas del infierno la esperaban cuando él la liberó de su encierro y lo encontró con un nuevo interés entre las manos, esas que alguna vez la manipularon con tanto amor. Su reflejo entre las cenizas es opaco, acabado. El miedo ya lo conoció y se fue; ahora sólo queda la soledad y una lágrima corriendo por la madera.

Una finísima joya de increíble belleza y exquisita delicadeza se asoma entre las farsas, comedias y melodramas que invaden la casa de MicroTeatro en esta temporada. Entre la suciedad y el polvo que produce el carbón se levanta “Milenka”, una verdadera delicia que hipnotiza con su poeticidad y dolor. El texto de Alejandra Sánchez es elegante y sutil, llevándonos paso a paso, sin ninguna prisa, hacia una revelación final que consigue amarrar la historia con finos hilos de seda. Sin embargo, es la dirección de Andrés Tena lo que eleva a “Milenka” de una muy linda obra a una pieza de arte. Su manejo del espacio, de un espejo, un listón rojo y de un simple muñeco de trapo consigue que la suciedad que produce el carbón se ilumine con la belleza estética del montaje. Para un cierre perfecto, la actuación de Sheyla Ferrera (quien alterna funciones con Alejandra Sánchez) es perfectamente congruente con dramaturgia y dirección para crear una unidad perfecta. “Milenka” es teatro obligado durante su visita por MicroTeatro “Por Fantasía”.

ENCUENTRA LAS MICRO RESEÑAS DE SALAS 1 A 7 EN www.entretenia.com

Búscanos en Facebook y Foursquare como Entretenia

DATOS GENERALES

(Toda la información contenida a continuación proviene de la producción)