Para quienes quieren enfrentar el proceso del adiós.

LA VOZ HUMANA

Gris. Todo es gris. Las paredes, la silla, las ventanas, las puertas, los marcos y los espejos. Todo. Todo es gris. El color no existe y ella siente que nunca volverá a existir. ¿Cómo podría existir el color si él ya no está? Se ha ido y la ha dejado. La ha dejado por otra y ya se van a casar.

El teléfono. El teléfono suena. El corazón se detiene por un segundo, un segundo nada más, para empezar a latir con toda fuerza. Va a estallar. Es él. Le está llamando. ¿Qué quiere? ¿Por qué llama? ¿Está arrepentido y quiere volver? ¿Me dirá que me ama y que todo esto ha sido un error?

“La Voz Humana” del gran escritor francés Jean Cocteau, nos lleva al dormitorio de una mujer que acaba de perder a quien ama. Más bien dicho, quien ella ama, la acaba de dejar. Un dormitorio donde su teléfono se vuelve la única conexión con el mundo que le interesa, que vale la pena y que es real: el de él.

Una de las motivaciones de Jean Cocteau para escribir “La Voz Humana” fueron las quejas de sus actrices de que sus obras estaban demasiado enfocadas al trabajo del director y al texto, por lo que no se les daba la suficiente oportunidad de lucir todos sus potenciales en escena. Cocteau decidió complacerlas con este monólogo y nos regala la oportunidad de ver a Karina Gidi llenando el escenario con su mera presencia.

Karina, quien es considerada una de las más grandes actrices del país gracias a su trabajo en la obra “Incendios”, deja atrás su papel de Nawal para entregarse a la interpretación de esta mujer atada al teléfono, en espera de poder dejar su dolor atrás, con la esperanza de poder vivir algún día, en ausencia de su amor. La actuación que nos ofrece es difícil de ver, ya que en su realismo uno no puede dejar de sentir su dolor y desesperación. Este papel lo hizo alguna vez Ingrid Bergman. Karina Gidi no le pide nada. Soberbia.

Arturo Castro sabe lo que quiere conseguir con su dirección de “La Voz Humana”, y lo logra casi a la perfección. La conceptualización gris del escenario es poderosa y crea una sensación de zozobra que refleja el alma de ella, sufriendo por su amor. El camino que debe recorrer el personaje de Karina es largo y difícil de atestiguar y el ritmo que la obra consigue vuelve hipnótico este viaje. Son 70 minutos que transcurren en un cerrar de ojos y un par de lágrimas, en una gran simbiosis entre una dirección sólida y una actriz comprometida.

El único elemento que me sale sobrando en la obra es la musicalización ya que me parece que añade un cierto tono melodramático a la puesta, que no lo necesita. Los sentimientos por los que está pasando esta mujer hablan por sí mismos y no requieren de una sobre-enfatización musical. La obra es elegante en su manufactura, no necesitaba de ese elemento.

“La Voz Humana” es una invasión del espectador al dolor de una mujer que tiene que lidiar con un hecho devastador: la persona que amas no quiere estar contigo. Es también una confrontación con nuestras necesidades y realidades enfermizas de comunicación. Es una obra hermosa y terrible que cuenta con una actuación difícil de olvidar. No me refiero a después de acabada la obra, me refiero para el resto de nuestra vida.

Qué fácil sería voltear y llamarla patética. Con que desenfado se podrían invalidar los sentimientos de esta mujer llamándola dramática, chantajista y estúpida. Nos podrían resultar ridículos sus intentos de llamar la atención, dejando de comer o intentando suicidarse, si no fuera porque, de hacerlo,  tendríamos que mordernos la lengua. ¿Quién en verdad será capaz de lanzar la primera piedra? “La Voz Humana” es un espejo. Es un espejo en el que todos hemos visto el más horrendo reflejo. Es un reflejo de hasta dónde podemos descender, de todo el poder que le llegamos a entregar a alguien más sobre nuestra vida, de que tanto dependemos de un objeto o de alguien más para ser feliz. “La Voz Humana” ha sido la voz de cada uno de ustedes, y mía, en algún momento. Es la voz de todos nosotros, llorando por amor. ¿Quién mejor que Karina Gidi para representar esa voz y entregar el mejor monólogo de la temporada? Nadie. Absolutamente nadie.

DATOS GENERALES

(Toda la información contenida a continuación proviene de la producción)