Para quienes quieren descubrir si son capaces de ver directamente a los ojos a sus propias fantasías.

LA PURA IDEA EXCITA

“El más morboso pierde.”

Dos cuerpos desnudos, a la vista de todos para ser observados, analizados, admirados, criticados o, incluso deseados, con sus genitales tan expuestos como sus miradas, dan la bienvenida e invitan a que las fantasías se liberen. Infidelidades, encuentros casuales en un bar, seducciones funerarias y una que otra perversión en medio de la ignorancia, todas son parte de un juego llamado sexualidad en el cual todos jugamos, aunque no lo queramos aceptar.

“Siempre hay lugar para una fantasía.”

Un hombre que busca seducir mujeres vulnerables en funerarias, una pareja que confiesa sus infidelidades, una mujer que se atreve por fin a liberar la bestia que lleva dentro y un hombre de lo más modesto se confiesa ante el público. El reconocido dramaturgo David Gaitán explora la sexualidad humana con “La Pura Idea Excita”, una obra conformada por una serie de viñetas que, lejos de escandalizar o confrontar como pareciera ser la intención del escritor, entretienen por su ingenio y humor a partir de cierta concepción casi adolescente de lo que conforma el muy complejo universo del tánatos.

“Todo mundo se viste para excitar a los demás.”

Con una iluminación con luces de halógeno, apropiadamente conocida como luz desnuda, los ritmos primales de una batería y el sensual ritmo de un saxofón tocados en vivo y capas de ropa que poco a poco se van sumando a dos cuerpos desnudos, la dirección de Enrique Aguilar para “La Pura Idea Excita” es una saturación de estímulos escénicos con la intención de guiar al público por cada una de las diferentes historias en la narrativa que, aun cuando funcionan, podrían ser de mucho mayor impacto y efectividad si fueran utilizados bajo la premisa de menos es más, dado que a momentos pareciera que el creador no confía lo suficiente en el texto, teniendo que añadirle a este capa sobre capa de lenguajes teatrales tal y como sus actores se ponen más y más vestimentas a lo largo de la puesta. Sin embargo, es importante destacar que Aguilar entiende bien como confrontar al público, como manipularlo para que este se deje llevar por su propuesta, permitiendo que un espectador casual se entregue de lleno a la narrativa como a las fantasías con el simple hecho de usar una cuchara como prueba de embarazo, al usar una prueba de embarazo como cuchara.

“Nuestro deseo de no ser humillados es más fuerte que nuestro deseo.”

En una obra donde la propuesta central es que la desnudez física no es ni remotamente tan relevante como la desnudez del alma o de los sentimientos resulta desconcertante ver a los actores Tamara Niño de Rivera y David Daniel realizar un trabajo basado mucho más en la forma que en el fondo, en respetar un trazo escénico casi coreográfico que en vulnerarse y fracturarse con honestidad. Esto no se debe a una falta de talento o de capacidad histriónica, sino posiblemente a su juventud y a la propuesta que el director maneja. En la medida en que tanto actor como actriz verdaderamente revelen sus sentimientos ante el espectador, que con franqueza ofrezcan sus cuerpos desnudos como ofrenda al público y se dejen llevar más por las palabras y lo que significan que por lo que hacen en escena el montaje cobrará mucha más fuerza y relevancia dado que ambos tienen la madera para lograrlo.

“¿Qué estarías dispuesta a hacer por un halago?”

En una sociedad tan supuestamente avanzada y evolucionada como la que vivimos resulta desconcertante la imposibilidad que aún tenemos de hablar directamente, mirándonos a los ojos, sobre las fantasías que tenemos, las perversiones que escondemos, los fetiches que nos activan o las preferencias que tengamos. Seamos honestos y hablemos como adultos: todos lo hacemos. Aceptémoslo y dejemos que nuestra mente vuele libre para excitarse como mejor le plazca.

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DATOS GENERALES

(Toda la información contenida a continuación proviene de la producción)

OBRA: “La Pura Idea Excita”

DRAMATURGIA: David Gatián

DIRECCIÓN: Enrique Aguilar

ACTUAN: Tamara Niño de Rivera y David Daniel.

DÓNDE: Sala Novo

DIRECCIÓN: Madrid 7, Del Carmen Coyoacán.

CUÁNDO: Viernes 20:00 hrs. Hasta el 27 de Agosto.

COSTO: $200 entrada general. Aplican descuentos. Boletos en taquilla y en www.redticket.com.mx

DURACIÓN: 70 minutos sin intermedio

DATOS DEL TEATRO: No cuenta con estacionamiento o valet parking. Les recomendamos revisar el resto de su cartelera.

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