Para quienes quieren disfrutar del musical norteamericano más exitoso en la historia de Broadway.

CHICAGO, EL MUSICAL

“Anda y ven, prendamos la ciudad… y todo el jazz.”

Se ha cometido un nuevo crimen en la violenta ciudad de Chicago y los reporteros están desesperados por dar a conocer la noticia. La hambrienta de fama Roxie Hart ha disparado sobre su amante, hecho no sólo deplorable, sino que aparte le ha robado los encabezados de los periódicos a la bailarina de vodeville y también asesina Velma Kelly. Será misión del no tan amoroso abogado Billy Flynn y la no tan generosa carcelera Mama Morton salvar de la horca las vidas de estas dos pobres víctimas de la sociedad, del alcohol, y por supuesto del… jazz.

“Supongo que quieren saber por qué le disparé al bastardo.”

Reconocida como el musical norteamericano de mayor éxito en la historia de Broadway, “Chicago, el Musical” es una ácida sátira en vodevil escrita por los íconicos creadores escénicos Bob Fosse, John Kander y Fred Ebb, equipo responsable también de Cabaret, musical que lanzaría a la fama a Liza Minelli. A través de la historia de dos glorificadas asesinas, el libreto de Fosse y Ebb critica y ridiculiza la manera en que la sociedad estadounidense ha glorificado la violencia, convirtiendo en celebridades a criminales, tema que resulta más relevante que nunca gracias a la invasión de las redes sociales en prácticamente cada aspecto de nuestras vidas. Sin embargo, es a través de la música de Kander y las letras de Ebb, en canciones tan poderosas como Todo el Jazz, Mami Buena Es, Señor Celofán y Hoy por Hoy, que la narrativa adaptada de la obra de 1926 del mismo nombre escrita por Maurine Dallas Watkins cobra verdadera fuerza hipnótica, razón por la que que ha sido ovacionada por millones de personas en todo el mundo desde su remontaje en Nueva York en 1996.

“A quien el mundo aclamará tendrá que ser… ¡Roxie!”

En la cárcel del condado Cook de la ciudad de Chicago seis mujeres presentan sus argumentos para haber matado a sus esposos cantando el Tango de la Cárcel. Infidelidades, secretos, hábitos muy molestos y una inteligible explicación en húngaro son parte de una canción que explica que lo que esas víctimas de la sociedad hicieron fue un asesinato, pero no un crimen. Uno de los aspectos más sólidos en “Chicago, el Musical” es sin duda su música, misma que mantiene el mismo brillo en su versión en español gracias a la traducción de Álvaro Cerviño. Desde la primera nota de una trompeta que anuncia el inicio de la afamada Todo el Jazz, hasta la cínicamente divertida canción de Clase o la profunda critica social detrás de Apantalle, pasando por clásicos como Roxie y Hot Honey Rag, cada una de las canciones de Kander y Ebb mezclan el sabor de los 20s con ritmos decadentes y entretenidos de jazz, logrando una partitura memorable y entre las mejores en la historia del teatro musical.

“Siempre quise mi nombre en los periódicos.”

La banda de más de diez músicos tiene el punto focal sobre el escenario. La paleta de colores primordial está enfocada en los grises, el blanco y el negro. Los vestuarios de todos los participantes se conforman de transparencias, tacones y bombines, elementos que enfatizan la sensualidad del jazz. La escenificación es verdaderamente minimalista, alejándose de la gran parafernalia teatral para poner el reflector sobre el cuerpo humano, la actoralidad, la música, pero sobre todo sobre las deslumbrantes coreografías inspiradas en la técnica creada por Bob Fosse que se caracterizan por su ultra estilizado estilo y su milimétrica precisión. La producción de “Chicago, el Musical” que llega a México es una réplica de la que se presenta actualmente en Nueva York en cada uno de sus aspectos. El resultado es exitoso al demostrar que la fortaleza de la dirección original de Walter Bobbie, así como la exquisitez detrás de la corografía de Ann Reinking, inspirada en Fosse, es relevante, actual y digna de ser ovacionada.

“Mi argumento es que yo no lo hice.”

Desesperada por haber perdido el foco de atención no sólo de su abogado sino de los periódicos que clamaban que su doble asesinato había sido el crimen del siglo, Velma Kelly le propone a la nueva luminaria de la cárcel, Roxie, que unan fuerzas en un acto conjunto. Entre acrobacias, baile, malos chistes y una sonrisa congelada en su cara, Velma hace lo imposible para conseguir la aprobación de una Roxie que claramente no podría estar menos interesada. Una de las cartas más fuertes que ostenta “Chicago, el Musical” es la presencia de Biby Gaytán en el papel de Velma Kelly. Con energía y mucho humor en su actuación, con una voz enronquecida que le da mayor personalidad al personaje y con una técnica de baile que permite el lucimiento de las muy complejas coreografías, Gaytán regresa a los escenarios con fuerza y talento. A su lado, María León entrega una Roxie Hart de voz hermosa, teniendo momentos de verdadero brillo como cuando se convierte en un títere en manos de su abogado en el número de Ambos Forcejearon por la Pistola. Dignos de destacar también son los trabajos de Michelle Rodríguez como la matrona “Mama” Morton y de R. Plascencia como la reportera Mary Sunshine. Ambos sacan a relucir toda sus venas cómicas y sus muy potentes capacidades vocales. Una vez dicho esto, una mención aparte y necesaria de ovacionar es para el ensamble conformado por Alma Cero, Carlos Pérez Banega, Carolina Laris, Cristina León, Dio Hondares, Elías Ajit, Esteban Provenzano, Federico Stegmayer, Fernanda Caballero, Gloria Toba, Jacobo Toledo, Jos´´e Antonio Domínguez Domínguez, Leo Wagner, Marien Caballero Galvé, Rodrigo Negrini, Stephanie Bernal y Yoli Campos. Cada uno de ellos consigue dar vida y presencia a la estética de “Chicago, el Musical”, principalmente en el dominio de las coreografías. El elenco lo completan Pedro Moreno y Pepe Navarrete en los papeles de Billy Flynn y Amos Hart respectivamente.

“En esta ciudad el asesinato es una forma de entretenimiento.”

Hace tres años celebré mi luna de miel en Nueva York. Mi esposo y yo vimos 11 musicales en 9 días. Uno de ellos fue Chicago y la decepción que nos llevamos fue monumental. La obra se sentía cansada, descuidada, con actores que claramente ya habían dado más funciones de las que deberían. Me llena de orgullo el poder decir que la producción de México ha logrado reivindicar tan gran puesta en escena, con exactamente los mismos elementos, pero con una energía que se transmite a todas las butacas.

 DATOS GENERALES

(Toda la información contenida a continuación proviene de la producción)

DATOS GENERALES

(Toda la información contenida a continuación proviene de la producción)

OBRA: “Chicago, El Musical”

LIBRETO: Bob Fosse y Fred Ebb

MÚSICA: John Kander

LETRA: Fred Ebb

TRADUCCIÓN: Álvaro Cerviño

DIRECCIÓN: Walter Bobbie

DIRECCIÓN RESIDENTE: Carolina Herzlt

COREOGRAFÍA ORIGINAL: Ann Reinking

ACTÚAN: Biby Gaytán, María León, Pedro Moreno, Michelle Rodríguez, Pepe Navarrete, R. Plascencia, Alma Cero, Carlos Pérez Banega, Carolina Laris, Cristina León, Dio Hondares, Elías Ajit, Esteban Provenzano, Federico Stegmayer, Fernanda Caballero, Gloria Toba, Jacobo Toledo, Jos´´e Antonio Domínguez Domínguez, Leo Wagner, Marien Caballero Galvé, Rodrigo Negrini, Stephanie Bernal y Yoli Campos.

DÓNDE: Teatro Telcel

DIRECCIÓN: Lago Zurich 245, Primer Piso. Colonia Ampliación Granada. Dentro de Plaza Carso.

CUÁNDO: Jueves y Viernes 20:00, Sábado 17:00 y 20:30, Domingo 13:00 y 17:30 horas.

COSTO: $2500, $2200, $2000, $1900, $1700, $1600, $1400, $1300, $1100, $950, $900 y $750. Boletos en taquilla o www.ticketmaster.com.mx

DURACIÓN: 130 minutos con un intermedio de 15 minutos.

DATOS DEL TEATRO: Cuenta con estacionamiento.