ABRASZARTE

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Para quienes entienden que en una prenda se puede contener toda la belleza, o esconder todo el dolor, de la humanidad.

ABRASZARTE

Por Juan Carlos Araujo (@jcaraujob)
Fotografías: Ricardo Castillo Cuevas (RiAlCastillo)

“Estoy sangrando vino.”

En el centro comercial, todos hablaron de la bofetada que la señora Beatriz le propinó a la aparentemente inocente maestra Marissa; en la mente de Hugo, este altercado sería una bella tela de encaje borgoña esparcida por el suelo junto a una botella de vino caída. El juicio se acerca, un policía aficionado al boliche espera que, entre besos, se haga justicia, y lo único que un apasionado aspirante a diseñador puede hacer es crear el más perfecto atuendo para que su madre vaya a la corte como toda una modelo de Yves Saint-Laurent.

“Cuando Hugo me explica sus maquetas, yo imagino vestidos.”

El arte, la belleza y la creación como el camino hacia la salvación ha sido uno de los temas recurrentes en la dramaturgia de Michel Marc Bouchard, uno de los dramaturgos canadienses contemporáneos más importantes en la actualidad. Reconocido mundialmente por obras como Los Endebles, Tom en la Granja y La Divina Ilusión, Bouchard ha sido capaz de crear personajes complejos, atormentados por sus pasados, motivados por sus sueños de escapar sus duras realidades, seres cuyas pasiones los llevan a cometer grandes actos en los muy pequeños universos que habitan. Cada una de estas características se ven presentes en “Abraszarte”, una de sus obras más reciente que aborda el tema de la moda y el diseño desde un realismo mágico donde un beso es capaz de cambiar la percepción de la realidad de seres comunes viviendo sus muy ordinarias vidas.




“Aquí la gente no tiene cultura de la belleza.”

La vida que ha llevado Hugo ha sido una navaja que se encaja en su propia piel por voluntad propia. A manera de mecanismo de supervivencia, para poder lidiar con la agresividad de su madre, con la verdad de que quizás nunca pueda ver sus sueños hechos realidad más allá de la tienda de telas donde se esconde entre terciopelos y sedas, el joven tiene largas conversaciones en su mente con Yves Saint-Laurent, uno de los diseñadores más famosos de toda la historia. Este mentor imaginario a diseñar un traje que, en la mente de Hugo, será capaz de salvar a su madre de ir a prisión a causa de un ataque que la mujer propinó contra una hipócrita que tuvo la osadía de hablar de cosas de las cuales no tiene la menor idea. En lo que parecería de primera lectura una anécdota por demás sencilla, “Abraszarte” va develando entre los pliegues de sus telas narrativas preguntas mucho más profundas en torno al arte y la belleza como vehículos de sanación, a la miseria de lo común y los sueños de escapar lo pedestre. Es en estas capas de subtexto que Michel Marc Bouchard revela su genialidad como dramaturgo, en su capacidad de crear un ser tan roto como Hugo, con la osadía de ir besando a personas a quienes les cambia su percepción del mundo, o personajes tan aparentemente detestables como su mamá, Beatriz, quien poco a poco revela una fragilidad casi tan profunda como la de su hijo. Magia, seres imaginarios, bellas telas, un tierno policía confundido por el afecto que recibe inesperadamente y una maestra que quiere cocinar conejo se conjuntan para dar como resultado una dramaturgia poderosa que cuestiona nuestro lugar en el mundo, y lo que se debe hacer para cambiarlo si es que así lo deseamos.

“No podía quedarme atrapado en una costura.”

Al entrar al teatro, el espectador se encuentra con telas blancas colgando a manera de telón, sobre el suelo una serie de objetos entre los que destacan un gran libro de pasta dura rosa sobre Yves Saint-Laurent, una bolsa de estraza de la cadena de emparedados Subway, y una botella de vino cuyo líquido se representa como una tela borgoña con encaje que se esparce por el lugar. Al entrar a escena Marissa, luego de haber sido atacada por Beatriz, una pierna y un brazo están envueltos en esta misma tela, símbolo de que el vino ha caído sobre ella, o es la sangre que brota de su cabeza herida. A medida que la transcurre la obra, las telas del telón se van cayendo para revelar otros espacios, otras telas de diferentes tonalidades que reflejan la mente del protagonista. La dirección que Alonso Íñiguez aporta a “Abraszarte” se puede apreciar desde dos aristas, ambas exitosas en su concepción y ejecución. Por un lado, se admira la estética que aporta a la puesta en escena, misma que refleja el mundo interior de Hugo, donde las telas son lo que hablan, donde un taller de costura es una pasarela de Haute Couture, donde su día a día se traduce en un bello atuendo ya sea para declarar en la corte o para jugar a los bolos. Esto es posible gracias al trabajo de diseño de escenografía e iluminación a cago de Eva Aguiñaga y al diseño de vestuario de Luis Roberto Orozco. Por el otro lado, y enfatizando la misma propuesta, el tono que Íñiguez establece para los personajes llevan a que Hugo e Yves Saint-Laurent se presenten como seres reales, atormentados y fijados en la tierra, mientras que todos los demás humanos alrededor de Hugo parecieran versiones fársicas de sí mismas, seres exagerados que en la mente de Hugo se acercan incluso a la caricatura. Estas decisiones de montaje dan cuenta del evidente entendimiento que el director tiene del texto, de la estética que demanda y el tono que fortalece la premisa misma de la necesidad de encontrar belleza entre tanta miseria.




“Si tu sueño es destruir mi sueño, ese es tu sueño, no el mío.”

Hugo está angustiado pues Yves Saint-Laurent saltó al estrellato cuando tenía 21 años, dos más de los que él tiene ahora. Esta ansiedad se refleja en sus movimientos, en sus manos, en su hablar que a momentos es dulce, en otros lleno de rabia contenida. Su diseñador imaginario es su contraparte, meticuloso, amable y pausado, elegante siempre mientras se despide de sus imaginarios estéticos. En el ámbito más terrenal, la madre de Hugo se presenta como una mujer aguerrida, siendo que en su interior hay una parte rota que aun sangra por un amor que la violentó en demasía. Su némesis en la corte, la maestra Marissa, es dulce como un pan, inocente y bondadosa en apariencia, aun cuando hay un lado más oscuro en su interior. Alrededor de todo este caos se encuentra un policía marginado, con carencias emocionales capaces de sanar con un beso, aun cuando sus habilidades de negociación disten mucho de ser buenas. El elenco de “Abraszarte”, conformado por Natalia Traven, Pedro Mira, Alejandro Morales, Pablo Marines y Paloma Arredondo se manejan como una unidad en perfecta sincronía con la propuesta tonal de dirección a la que apunta Alonso Íñiguez, al mismo tiempo que operan desde la verdad emocional de la que sea capaz su propio personaje. De tal manera, Marines y Mira actúan desde el realismo, desde sentimientos congruentes aunque apasionados, mientras que el resto del elenco, reflejo de la mente de Hugo, se exacerba en la actoralidad, son versiones alteradas de los humanos que representan por la mente de Hugo, pero no por ello caen en la falsedad, sino que se mantienen en la congruencia constante que se demanda. Es por ello que Traven, como la mamá de Hugo, es capaz de decirle a su hijo que lo ama, pero su abrazo no es del todo verdadero, el policía llega a ser una versión caricaturesca de sí mismo, que se encela de no ser el único recipiente de los besos mágicos de un diseñador en potencia, mientras que Beatriz destila ponzoña sin saber la verdad de las cosas, pero siempre con la fachada de una falsa sonrisa.

“El amor perfecto es creación.”

Durante muchos años viví en una sombra que claramente se reflejaba en la ropa que usaba. Monocromático, uniformado por decisión, y secretamente avergonzado de todo lo que yo representaba, me sentía incapaz de usar una prenda hermosa, pues en mi cuerpo se vería ridícula. Con el paso del tiempo, enfrentando a mis propios fantasmas, y teniendo largas pláticas con mi propia versión de Yves Saint-Laurent, he sido capaz de transformarme y transformar mi realidad, de ser una versión llena de color, de belleza que se refleja en cada pieza de ropa que elijo para mostrarme ante el mundo. Hoy, con una falda azul, con un huipil morado de Oaxaca y con unas sandalias de tacón que compré en Guadalajara salgo a la calle lleno de orgullo, sintiendo que voy por una pasarela de Paris, en lo que voy por sushi para cenar.

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DATOS GENERALES

(Toda la información contenida a continuación proviene de la producción)

OBRA: Abraszarte

DRAMATURGIA: Michel Marc Bouchard

TRADUCCIÓN: Natalia Traven

DIRECCIÓN: Alonso Íñiguez

ELENCO: Natalia Traven, Pedro Mira, Alejandro Morales, Pablo Marines y Paloma Arredondo.

DÓNDE: Foro La Gruta dentro del Centro Cultural Helénico.

DIRECCIÓN: Avenida Revolución 1500, Guadalupe Inn.

CUÁNDO: Viernes 20:00, Sábados y Domingos 18:00 horas. Hasta el 23 de Junio 2024.

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Licenciado en Literatura Dramática y Teatro con experiencia de más de veinte años en crítica teatral. Miembro de la Muestra Crítica de la Muestra Nacional de Teatro y Miembro de la Agrupación de Críticos y Periodistas de México.

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